Históricamente el ser humano a través de los siglos, ha vivido modas sobre el color de la piel. Hubo una época después del Renacimiento hasta bien entrado el siglo XIX y XX (Según países) en los que lucir una piel blanca requería de un sacrificio a la hora de salir al exterior. Hoy en día en la mayoría de culturas y lugares, tomar el sol, es además de sentimiento vacacional, de relax, sociabilización y diversión,  un aporte de sol entre 5 y 30 minutos diarios suponen una mejora de la sintonización de la Vitamina D (Que apenas se encuentra en los alimentos que ingerimos) y una mejora importante en el estado de salud emocional para quien lo recibe del astro rey.

Hoy en día sabemos perfectamente las bondades que tiene recibir los rayos de Sol; incluso muchísimas personas somos las que  viajamos a zonas donde podamos hacerlo con frecuencia por la demostrada mejora física y mental, más cabe recordar un año más la importancia de hacerlo con las máximas garantías para proteger nuestra piel y al mismo tiempo lucir el mejor de los bronceados sabiendo que nuestra dermis va a estar perfectamente cuidada.

En 5th Avenue te recomendamos siempre que evalúes el tipo de piel que tienes en el momento de exponerte, para así aplicar el factor de protección solar adecuado a tu color, así como la cantidad de veces que debes aplicar según pasa el tiempo. Si te vas a bañar continuamente en una playa o piscina, debes tener en cuenta que un producto resistente al agua te dará mayor cobertura de protección.

Te recomendamos si empiezas a tomar el sol y llevas mucho sin hacerlo comenzar con “Sun Sensitive Delicate Comforting Cream SPF50 de Lancaster”.

Después en la medida en que pasen los días y tu color vaya siendo más bronceado podrás aplicar una bajada de protección para conseguir un mayor bronceado. También debes saber que  puedes iniciar con una crema fotoprotectora, labial y especial cara, como también el tipo de formato; en spray o tradicional.

Te recomendamos en sus diferentes factores de protección “Sun Beauty Satin Dry Oil SPF 30 de Lancaster”.

Recuerda que la exposición de tu cuerpo al Sol, no solo es de la piel, pues éste afecta directamente al cabello y para ello sería aconsejable si te gusta cuidar del mismo utilizar “Sun Care Oil Mist Body and Hair SPF30 de Clarins” ideal para el cuidado de cuerpo y cabello.

Una vez, has terminado y llegas al hotel, vivienda o residencia habitual, debes tener en cuenta que después de una gratificante ducha, no debes olvidar aplicar sobre toda tu piel un After Sun reparador como “After Sun Tan Intensifying Moisturising Lotion de Piz Buin” o “Express Aftersun de Anne Möller”.

Al igual que si por casualidad te has expuesto más de lo debido o no te has protegido lo suficiente, utilizar una crema de Aloe Vera, que contiene los mejores oligoelementos cicatrizantes para recuperar lo antes posible ese enrojecimiento y daño de sobreexposición a los rayos UVA. A nosotros nos encanta “Aloe Vera Nutrition Intense Cream de Aloveria”.

Disfruta del mejor de los veranos y ten en cuenta que se puede hacer perfectamente con el mejor de los cuidados para evitar las fatídicas manchas e incluso melanomas futuros.

¡Feliz verano 2022!